Vuelven los rituales de juntarnos a escuchar el rock de la esquina de mi barrio
En el mismo mes que Spotify revela que los artistas más escuchados de Argentina son solistas, los bandas vuelven a brillar con Los Piojos, Divididos, La Renga y los Fundamentalistas. En escenarios llenos de historias compartidas, se revive ese viejo pacto colectivo que los algoritmos no pueden replicar: el pogo, las topper y el canto al barrio. Mientras el mundo digital mide éxitos en streams, las resistencia de los íconos de los 90 nos recuerda que la música sigue siendo un acto de resistencia y unión, un refugio donde el "nosotros" vuelve a tener sentidoPor: Mariano Quiroga
Los tiempos cambian, y con ellos los rituales, los encuentros y las formas de relacionarnos con la música. Alguna vez, asistir a un recital significó un rito colectivo. No se trataba solo de ver a la banda, sino q...